viernes, 11 de junio de 2010

sin título pues no es piel

Volutas de la sangre en la pared
se precipitan al peñasco de tus ojos
que la rosa (la violencia) no aguanta el llanto,
se despecha de la mancha (joder)
y en cada veta una rosa es tu piel.

(Descarnada, sin hueso, sólo piel)

El fuego, la sangre y el calor de ladrillo.
Levantas sueños y me esperas mis entrañas,
las tejes, las levantas, las precipitas
y ahora las letras son el peñasco (o la araña),
donde en cada gruta revelamos
nuestros ángeles y nuestros pasos.

(velamos el cadáver ausente de sus versos asexuados)

Alas, las volutas no manchan de tus robos,
pero a las letras no le atañen nuestros rostros,
o nuestros pasos o siquiera un calcetín.
(susurro: ella sólo quiere tus uñas)
De la sangre su pañuelo, de los tiempos
tus lazos en tantas palabras dichas en vano.

(Pielpielpiel en esquizofrénica pared,
acolchonada nuncasangre y la cabeza es nada
no tiene sangre
no tiene nada.)

De tantas palabras que no atañen a los dos,
de los dos que laceran el espacio,
Donde cada palabra es un abrazo
y cada brazo el verso del viento
(del papel de la inhalación y la bocanada).
escribe de las volutas la palpitación
de la sangre pulverizada
de la piel que es roca y nunca verdad o acero.
(son tus versos)
De la piel que es ocaso de la pared.

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